Problemas de comportamiento y conducta
En la psicología infantil suele considerarse que el negativismo, la desobediencia y las rabietas son problemas de comportamiento o conducta. Antes de entrar a hablar de cada uno de ellos, es importante hacer una puntualización. El proceso de pasar de bebé a niño es largo y complejo, supone una serie de cambios físicos y evoluciones de nuestras estructuras cerebrales. No se puede pedir a un niño que se comporte como un adulto. Sencillamente, esto no es esperable ni deseable.
Los bebés y niños pequeños no paran, no entienden un no, luchan por sus deseos, se ofuscan cuando no entienden las negativas de los adultos y son básicamente egocéntricos. Esto es normal. Conforme van creciendo y les vamos informando con respeto y cariño de los límites de la vida en comunidad, poco a poco estas manifestaciones van reduciéndose y pueden llegar a mostrarse más razonables y empáticos.
Los psicólogos ayudamos a papás y a niños a sentirnos más cómodos, ayudamos a poner normas de forma razonable y enseñamos a los niños a manejar de forma socializada su frustración, enfado e irritabilidad.
